Si hubiėramos escrito este artículo hace 15 años, posiblemente nos hubieran tomado por locos. ¡Qué tontería, un perro en una boda! Bueno, pensándolo fríamente habrá quienes todavía lo piensen, pero cada vez menos. En EE.UU. hace muchos años ya oimos hablar de bodas donde los perros llevaban los anillos, llegaban con los novios en coche, se hacían fotos... También es verdad que EE.UU. es uno de los países, por no decir el único, donde los fabricantes de automóviles crean coches especialmente pensados para la comodidad del perro y la familia. Y donde hay una tienda para animales en cada esquina. Por lo que con las bodas no podría ser menos.

 

Es el día de tu boda, y recordando la canciòn de "Is my party and I cry if I want to"", es nuestra boda y hacemos lo que queremos, y si consideramos que nuestro perro debe de estar acompañándonos, pues que así sea. Después de haber decidido el día y la forma de llevar a cabo el enlace, empezamos con la selección del sitio. Queremos que sea un lugar agradable y bonito donde nos traten bien y a nuestros perros. Nos hemos puesto en contacto con las fincas que hemos considerado especiales y hemos preguntado si dejan celebrar nuestro enlace con nuestros canes. Su respuesta, ¡por supuesto!